Lo que debes tener en cuenta para jugar a pádel cuando hace frío

Con la llegada del frío si juegas a pádel, sobretodo en pistas outdoor, debes tener en cuenta algunos aspectos para que el juego sea fluido, lo pases bien y para que evites lesiones.   

Para empezar, es muy importante que la indumentaria sea la adecuada. Para el tronco superior, una sudadera con cremallera o cortavientos son muy recomendables ya que te protegen del frío y son fáciles de quitar una vez has entrado en calor. Para las piernas es habitual ver a jugadoras de pádel equipadas con mallas técnicas en las épocas del año más frías.  En definitiva, lo importante es que te abrigue sin que te llegue a agobiar y que te permita libertad de movimientos.

Otro aspecto básico, y el más importante, es el calentamiento, lo debes hacer a conciencia y tomarte tu tiempo hasta que notes que tus músculos están trabajando y que tu cuerpo está ágil y listo para exigirle movimientos explosivos y continuados. Revisa nuestro post “5 Ejercicios de calentamiento para empezar a jugar en 5 min” Lo ideal es empezar el partido con la menor ropa posible y que en las pausas te abrigues y te hidrates bien.   

Observa tu entorno. ¿Cómo está la moqueta de la pista? ¿Y las paredes? En estas fechas suele haber mucha humedad, las bolas se vuelven más pesadas y botan menos. Además es importante, en la medida de lo posible, evitar el rebote en las paredes ya que las bolas resbalan y se hace difícil devolverlas, sobretodo si llegan con poca velocidad. Con las bolas húmedas también se hace más difícil darle efecto a nuestros golpes, una pala con la superficie rugosa cómo, por ejemplo la nueva AT10 LUXURY GENIUS, te ayudará a mejorar este aspecto.

El frio puede afectar también a las características de tu pala, sobretodo a la dureza. Es importante que la guardes los más protegida posible de las bajas temperaturas (también de las muy altas en verano) un paletero con compartimentos térmicos cómo los paleteros Nox de la Serie PRO serán un complemento perfecto.

  Sigue estos consejos y… ¡a jugar valiente!